395. Las cuatro posturas «Cuando camina, un bhikkhu (monje que ha recibido todas las ordenes) sabe: "camino"; cuando está de pie, sabe, sabe: "estoy de pie"; cuando se acuesta, sabe: "estoy acostado". De ese modo conoce el cuerpo como cuerpo, tanto interna como externamente, independiente, sin aferrarse a nade en el mundo». SATIPATTHANA SUTTA
396. ¡Atentos! «La atención es el camino de la inmortalidad, y la falta de atención el camino de la muerte. Los que prestan atención no mueren, mientras que los que no la prestan ya son como muertos». DHAMMAPADA
397. El silencio del espíritu «He arrojado de mí el vertiginoso baile de la mente, y ahora soy libre en el silencio del espíritu». SRI AUROBINDO (1872-1950), INDIA
398. Se acabó el juego «No dejarás que tus sentidos conviertan tu corazón y tu mente en un campo de juego». ENSEÑANZA BUDISTA TIBETANA
399. Relámpago «¡Qué relámpago en la oscuridad es para el yo sumido en las tinieblas de la ignorancia alcanzar aunque solo sea un poco de conciencia!». ATISA (982-1054), TÍBET
400. Muy despierto, libre, suelto «No aceptes lo agradable ni rechaces lo doloroso. No afirmes ni niegues. ¡Mantente muy despierto en un estado de naturalidad sin falsear! Cuando así te mantengas, la señal del progreso será que tu cuerpo, tus palabras y tus pensamientos te parecerán libres y sueltos, más allá del placer y el dolor». PADMASAMBHAVA (SIGLO VIII), TÍBET
401. Esperando el alba «Debemos aprenderá a despertar de nuevo y a seguir despiertos, pero no mediante ayudas mecánicas, sino por una espera infinita del alba». HENRY DAVID THOREAU (1817-1962), ESTADOS UNIDOS
402. SEÑOR DE LAS AVES El garuda es un ave mítica, el halcón celestial de la mitología hindú. Tiene la parte superior del tronco y los brazos de hombre, y la cabeza, el pico y las patas de ave, con alas que brotan del centro de su espalda. Sale completamente formado del huevo, pudiendo volar. El garuda simboliza el estado plenamente consciente y despertó de la mente-Buda. Destruye cinco serpientes que representan las enfermedades físicas y psicológicas que hacen presa en todos los seres sensibles.
403. Mirando de todo corazón «¡Limítate a mirar, aquí y ahora, sin preguntar por el pasado ni el futuro! ¿Qué es? ¿Qué es realmente este "yo" que pregunta? ¿Quién ve, oye, siente y conoce? ¿Quién camina, está de pie, se sienta y se acuesta? ¿O se mueve sin descanso? Siempre, en todas partes, mira de todo corazón, sin dejar de mirar ni un solo instante. Para mirar de esta manera no hacen falta razones ni explicaciones. Es así como destruyes el baile de la duda». MAESTRO DAIBI (1882-1964), JAPÓN
404. El lama del corazón «Como la pura conciencia es el auténtico Buda, yo, abierto y satisfecho, encontré al lama dentro de mi corazón. Cuando nos damos cuenta de que esta mente natural sin fin es la propia naturaleza del lama, ya no hace falta rezar o lamentarse con apego o lágrimas». DUDJOM RIMPOCHE (1904-1987), TÍBET
405. Llevando al elefante «Si al elefante de la mente lo retiene de todo la cuerda de la conciencia, se desvanecen todos los peligros y se obtiene el bienestar total». SANTIDEVA (SIGLO VIII), INDIA
406. El pensamiento desbocado «La mente sin disciplinar es el origen de todos los males que no caen en la categoría del sufrimiento inevitable, como la enfermedad, la vejez y la muerte». SU SANTIDAD EL 14º DALAI LAMA (NACIDO EN 1934), TÍBET
407. Una sola cosa «Aunque te expliquen cien cosas y te cuenten mil, limítate a entender una sola. Sabiendo esa cosa todo queda libre. Mantente en tu naturaleza interna, tu conciencia». PADMASAMBHAVA (SIGLO VIII), TÍBET
408. La sede de la iluminación «No fundes tus puntos de vista en los sentidos y en el pensamiento, pero tampoco busques apartar la mente de los sentidos y los pensamientos, ni trates de entender la realidad rechazando los sentidos y los pensamientos. Cuando tu relación con ellos no sea de apego ni de desapego, gozarás de una libertad perfecta y sin estorbos, y poseerás la sede de la iluminación». HUAN-PO HSI-YUAN (SIGLO IX), CHINA
409. Tentaciones «No existe tentación o incitación, real o imaginaria, que no pueda superar un pensamiento bien disciplinado. Las ganas de resistir ya son la mitad del éxito». CHARLOTTE DACRE (1782-1841), INGLATERRA
410. Días buenos y malos «Durante mucho tiempo la meditación, como todo lo que se aprende, tendrá días buenos y malos. A veces solo rendirá un veinte por ciento, y otras, en cambio, un ochenta. Depende mucho de la vida cotidiana. Si se reduce en algún grado el egoísmo externamente, no volverá para turbar la meditación». TREVOR LEGGETT (1914-2000), INGLATERRA
411. Siempre ahí «La conciencia total es fluida y adaptable, presente en todas partes y momentos». LAO TSE (SIGLO VI A.C.), CHINA
412. Ser uno mismo «El hombre espiritual no depende de lo externo. Cuando no hay ninguna pantalla entre nosotros y la mirada ajena, llegamos a ser nosotros mismos, que es donde somos libres de distinciones y discriminaciones». D.T. SUZUKI (1870-1966), JAPÓN
413. Conciencia inspirada «Cuando te inspira un gran objetivo, todos los pensamientos rompen sus cadenas. Tu mente transciende las limitaciones, tu conciencia se expande en todas las direcciones y te encuentras en un mundo nuevo, grande y maravilloso. Las fuerzas, facultades y talentos latentes cobran vida, y descubres que eres mucho mejor de lo que habías soñado». PATANJALI (H. 200 A.C.), INDIA
414. Hacia el infinito «La meditación es la disolución de los pensamientos dentro de la conciencia pura sin objetivación: saber sin pensar, fundiendo lo infinito en lo infinito». SWAMI SIVANANDA (1887-1963), INDIA
415. El máximo tesoro «El sabio considera la atención como su máximo tesoro». DHAMMAPADA
416. El que todo lo sabe El maestro y sabio budista Longchenpa (SIGLO XIV) estudió con los principales maestros de su época y escribió mas de doscientas cincuenta obras sobre el budismo. Merecedor del titulo kun-mkhyen, "que todo lo sabe", su vida errante estuvo marcada por el exilio político y el retiro del mundo.
417. Mar «Que así sea, terso y lustroso como el mar sin olas, libre del cieno del sujeto y el objeto». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
418. Montaña «Que así sea, firme e inamovible como una montaña, sin expectativas ni temores, sin afirmación ni negación». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
419. Cielo «Que así sea, abierto y brillante como el cielo, sin partidismos ni nubes de conceptos». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
420. Espejo «Que así sea, claro y brillante como un espejo». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
421. Arco iris «Que así sea, como el arco iris, completo e independiente desde que aparece, claro y brillante sin euforias, ni tristezas que lo turben». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
422. Arquero «Que así sea, como un arquero que nada distrae, en esa conciencia natural y prístina, sin tensar ni aflojar, firme en la máxima tensión». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
423. Acabado «Que así sea, como alguien que ha acabado su trabajo y está seguro de ello, espontáneamente presente, sin expectativas ni temores». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
404. El lama del corazón «Como la pura conciencia es el auténtico Buda, yo, abierto y satisfecho, encontré al lama dentro de mi corazón. Cuando nos damos cuenta de que esta mente natural sin fin es la propia naturaleza del lama, ya no hace falta rezar o lamentarse con apego o lágrimas». DUDJOM RIMPOCHE (1904-1987), TÍBET
405. Llevando al elefante «Si al elefante de la mente lo retiene de todo la cuerda de la conciencia, se desvanecen todos los peligros y se obtiene el bienestar total». SANTIDEVA (SIGLO VIII), INDIA
406. El pensamiento desbocado «La mente sin disciplinar es el origen de todos los males que no caen en la categoría del sufrimiento inevitable, como la enfermedad, la vejez y la muerte». SU SANTIDAD EL 14º DALAI LAMA (NACIDO EN 1934), TÍBET
407. Una sola cosa «Aunque te expliquen cien cosas y te cuenten mil, limítate a entender una sola. Sabiendo esa cosa todo queda libre. Mantente en tu naturaleza interna, tu conciencia». PADMASAMBHAVA (SIGLO VIII), TÍBET
408. La sede de la iluminación «No fundes tus puntos de vista en los sentidos y en el pensamiento, pero tampoco busques apartar la mente de los sentidos y los pensamientos, ni trates de entender la realidad rechazando los sentidos y los pensamientos. Cuando tu relación con ellos no sea de apego ni de desapego, gozarás de una libertad perfecta y sin estorbos, y poseerás la sede de la iluminación». HUAN-PO HSI-YUAN (SIGLO IX), CHINA
409. Tentaciones «No existe tentación o incitación, real o imaginaria, que no pueda superar un pensamiento bien disciplinado. Las ganas de resistir ya son la mitad del éxito». CHARLOTTE DACRE (1782-1841), INGLATERRA
410. Días buenos y malos «Durante mucho tiempo la meditación, como todo lo que se aprende, tendrá días buenos y malos. A veces solo rendirá un veinte por ciento, y otras, en cambio, un ochenta. Depende mucho de la vida cotidiana. Si se reduce en algún grado el egoísmo externamente, no volverá para turbar la meditación». TREVOR LEGGETT (1914-2000), INGLATERRA
411. Siempre ahí «La conciencia total es fluida y adaptable, presente en todas partes y momentos». LAO TSE (SIGLO VI A.C.), CHINA
412. Ser uno mismo «El hombre espiritual no depende de lo externo. Cuando no hay ninguna pantalla entre nosotros y la mirada ajena, llegamos a ser nosotros mismos, que es donde somos libres de distinciones y discriminaciones». D.T. SUZUKI (1870-1966), JAPÓN
413. Conciencia inspirada «Cuando te inspira un gran objetivo, todos los pensamientos rompen sus cadenas. Tu mente transciende las limitaciones, tu conciencia se expande en todas las direcciones y te encuentras en un mundo nuevo, grande y maravilloso. Las fuerzas, facultades y talentos latentes cobran vida, y descubres que eres mucho mejor de lo que habías soñado». PATANJALI (H. 200 A.C.), INDIA
414. Hacia el infinito «La meditación es la disolución de los pensamientos dentro de la conciencia pura sin objetivación: saber sin pensar, fundiendo lo infinito en lo infinito». SWAMI SIVANANDA (1887-1963), INDIA
415. El máximo tesoro «El sabio considera la atención como su máximo tesoro». DHAMMAPADA
416. El que todo lo sabe El maestro y sabio budista Longchenpa (SIGLO XIV) estudió con los principales maestros de su época y escribió mas de doscientas cincuenta obras sobre el budismo. Merecedor del titulo kun-mkhyen, "que todo lo sabe", su vida errante estuvo marcada por el exilio político y el retiro del mundo.
417. Mar «Que así sea, terso y lustroso como el mar sin olas, libre del cieno del sujeto y el objeto». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
418. Montaña «Que así sea, firme e inamovible como una montaña, sin expectativas ni temores, sin afirmación ni negación». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
419. Cielo «Que así sea, abierto y brillante como el cielo, sin partidismos ni nubes de conceptos». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
420. Espejo «Que así sea, claro y brillante como un espejo». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
421. Arco iris «Que así sea, como el arco iris, completo e independiente desde que aparece, claro y brillante sin euforias, ni tristezas que lo turben». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
422. Arquero «Que así sea, como un arquero que nada distrae, en esa conciencia natural y prístina, sin tensar ni aflojar, firme en la máxima tensión». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
423. Acabado «Que así sea, como alguien que ha acabado su trabajo y está seguro de ello, espontáneamente presente, sin expectativas ni temores». LONGCHENPA (1308-1363), TÍBET
No hay comentarios:
Publicar un comentario